Intentaré poner negro sobre blanco sobre el fichaje de Raul García
por nuestro Athletic Club. La verdad es que futbolísticamente está más que
claro que el fichaje podría resultar más que positivo para un Athletic que en
ocasiones resulta muy poco competitivo, sin ir más lejos ayer ante el Éibar.
Sin embargo eso no cambia para nada mi opinión acerca de un jugador al que he
visto encararse en más de una ocasión a la afición que a partir del próximo
jueves intentará conquistar en el campo con su lucha y entrega.
Hay otra cosa que me preocupa, esta
directiva en más de una ocasión ha apelado al compromiso y al sentimiento para justificar
imposibilidades o fracasos como por ejemplo ante los casos de Amorebieta,
Llorente, o Javi Martinez o ante la incapacidad de traer a jugadores como
Monreal o Azpilicueta. Todos le hemos oído recurrir al compromiso para
disfrazar lo que seguramente ha sido error en la gestión de la situación.
Ni los que se van son antiathletic ni
todos lo que vienen son leones de corazón, simplemente son profesionales del fútbol, lo que algunos dependiendo de quien se trate, llaman mercenarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario